sábado, 25 de abril de 2015

POESÍA: Noche de los Libros con Wislawa Szymborska

Desde que leo a Szymborska intento no perderme ningún evento relacionado con su poesía, porque siempre es un placer celebrarla en compañía de otros lectores. Afortunadamente, estos encuentros suceden con relativa frecuencia - frecuencia hablando de poesía polaca en España - gracias entre otras cosas al Instituto Polaco de Cultura, muy activo y siempre dispuesto a dar a conocer la cultura polaca en nuestro país.

Para quien a estas alturas aún no sepa quién es Szymborksa - qué envidia, puede empezar de cero con su obra - sólo diré que es una poeta polaca que recibió el Nobel de Literatura en el año 1996. Una personalidad fascinante y una poesía aún más fascinante. Yo no leo este género asiduamente, pero sus poemas son tan sencillos y a la vez tan profundos... habla de la vida, de la realidad, de las cosas que nos rodean, de una forma que estremece. Es clarividente y asequible, poesía para todos, nada de estos textos rebuscados y simbólicos que sólo se supone que entienden algunos críticos. Empiezas con un poema y antes de que te des cuenta tienes toda su obra en la mesilla de noche, lo digo por experiencia.




A lo que iba: esta Noche de los Libros en Madrid tuvo lugar la presentación de la próxima antología de Szymborksa que va a ser publicada en España por Nordica.

Es una excelente noticia que toda la obra de Szymborska esté publicada en  castellano, siendo más o menos difícil de encontrar. En los últimos tiempos hay numerosas reediciones y antologías, la mayoría haciendo referencia a las traducciones de Abel Murcia y Gerardo Beltrán, los traductores por excelencia de Szymborksa en castellano y unas personalidades interesantísimas. El encuentro con ellos y otro traductor de poesía polaca, Xavier Farré, organizado en la Comisión Europea, fue una de las mejores experiencias en las que participé el año pasado.

Bueno, que me enrollo. El caso es que se presentaba una nueva antología ilustrada por Kike de la Rubia en Ivorypress - una librería/galería de arte moderno muy peculiar en Comandante Zorita -. Para allá que me fui, quizá con las expectativas un poco altas. Pero adjunto la invitación para que se me comprenda.

La mesa redonda fue muy breve, con intervenciones de los ponentes arriba mencionados. Será porque he ido a varias actividades relacionadas con el tema, pero esperaba algo más. Al contrario que le pasó a Umbral, mucho libro y poca escritora. También eché de menos un turno de preguntas, algo para incluir al público. Quizá así habría sido algo más dinámico. La gente en estos casos suele querer participar. 

A continuación tuvo lugar el recital de poesía, y ahí sí me quito el sombrero. Oír a Szymborska siempre es un placer, y me pareció fenomenal - esperable, pensándolo fríamente - que la poesía se leyera tanto en castellano como en polaco. La voz de Irene Escolar era la más adecuada posible, y Jaroslaw Bielski no se quedaba atrás. 

Al concierto y al vino no me pude quedar, pero la verdad es que todo se me quedó muy corto. Empezamos como a las 20.15, y a las 21.20 salía de ahí. Pero lo peor de todo fue sinceramente la acústica. El equipo de sonido no estaba bien ajustado - o retumbaba o no se oía... quizá habría que haberlo probado antes - y el lugar no era muy idóneo. Con lo grande que era la galería, creo que se podía haber ubicado mejor a los 50 que éramos. Creo que se intentó que fuera en una zona con inclinación, pero la verdad es que el ruido de la puerta fue especialmente molesto. Más que la puerta en sí, el ruido de la calle cada vez que alguien entraba o salía. Jo, que era un recital de poesía: el silencio era imperativo. 

Pese a todo, recomiendo encarecidamente ir a cualquier evento de este tipo. Quizá yo soy excesivamente crítica, o es que ya he ido a unos cuantos, pero la verdad es que siempre me llevo algo nuevo y me alegro mucho de ir. Aún más si desconocéis a Szymborska. De hecho, para solucionar eso, el Instituto Polaco nos regaló un CD con algunos poemas de la poeta leídos por  Julia Gutiérrez Caba. Yo ya lo tenía - eventos anteriores - así que se lo regalaré a una amiga a ver si le pica el gusanillo y al próximo recital me la llevo.

Noche de los Libros con Wislawa Szymborska
¿Cuándo? 23 de abril de 2015
¿Dónde? Ivorypress (c/ Comandante Zorita 48 - Metro Santiago Bernabéu)

jueves, 23 de abril de 2015

TEATRO: Enrique VIII y la cisma de Inglaterra

Después de una mala racha de obras teatrales, fui en marzo a ver Enrique VIII y la cisma de Inglaterra en el Teatro Pavón. Iba por iniciativa de una amiga, porque nunca - o pocas veces - digo que no a una obra de teatro, pero sin demasiadas expectativas pese a ser una obra de Calderón. Quizá porque mi última experiencia con una obra clásica ante la que sí tenía expectativas resultó ser un desastre - lo dejo para otra entrada. Pero lo cierto es que salí encantadísima del teatro, después de ver una montaje muy trabajado y unas interpretaciones impecables.


La cisma de Inglaterra es una obra de juventud de Calderón y se sitúa durante el reinado de Enrique VIII (s. XVI), cuando se encuentra casado con Catalina de Aragón y aparece Ana Bolena. La denominada entonces "Cuestión real" surge cuando el rey se encapricha de Ana y pretende disolver su matrimonio con Catalina, con la que ya tiene una hija, María. Esto termina desencadenando la ruptura con la Iglesia Romana. 


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                           Sergio Perís-Mencheta como Enrique VIII                     Enrique VIII por Hans Holbein, el joven


Aunque la obra parte de un hecho histórico, no se ajusta perfectamente a él. Calderón pretende dotar a la obra de un valor moralizante, y por eso deforma algunas situaciones.Se tratan temas que posteriormente aparecerán en obras mayores del dramaturgo, como el destino frente al libre albedrío o la importancia de anteponer el bien de la mayoría a los deseos individuales. En palabras de Ignacio García, director del montaje:

"¿Qué responsabilidad tiene un monarca frente al pueblo que gobierna? ¿Qué sucede cuando la máxima institución del Estado antepone sus deseos o intereses a los de su nación? ¿O cuando está mal asesorado por sus consejeros? ¿Qué espiral de caos, de violencia y de desorientación puede proyectar la corona sobre la Corte y el Estado entero? ¿Cuántas víctimas pueden quedar como rastro de un infame reinado? "

Efectivamente, son preguntas de escandalosa actualidad que nos hacen pensar y reflexionar. Al final de la obra, la respuesta es clara. Enrique VIII se arrepiente de haber repudiado a Catalina y a su hija María, y declara esta última heredera. Termina la obra con una corona sobre la cabeza de la princesa y todos los personajes repitiendo a coro una promesa de fidelidad al pueblo y a sus intereses. Un final bastante épico e impactante, buena muestra del dramatismo que impregna toda la obra.

Hasta aquí el argumento, , pero ahora toca hablar de los actores y la puesta en escena. Pepa Pedroche como Catalina está soberbia, al igual que Emilio Gavira como Pasquín, un bufón enigmático que aporta humor, sabiduría y cinismo a partes iguales. Pero en general todos los actores interpretan un gran papel, que contribuyen a elevar un texto menor y muy dramático a una gran obra teatral, todo ello por supuesto bajo la dirección de Ignacio García.

La escenografía y el vestuario merecen un aparte. Los trajes son sencillamente fabulosos y permiten ambientar perfectamente la obra. A esto también ayudan las dos músicas que tocan instrumentos tradicionales al borde del escenario durante toda la obra. La escenografía es limpia y efectiva, con efectos como los del espejo al final de la obra que aportan un toque diferente y sobre todo mucha mucha calidad.

Porque esta es la palabra que mejor define este espectáculo: calidad. Teatro clásico poco conocido, representado con mucha profesionalidad y arte. Un verdadero acierto, que no podría recomendar más.

¿Dónde? Teatro Pavón (c/ Embajadores, 9 - Metro Lavapiés, Embajadores o Tirso de Molina)
¿Cuándo? Del 27 febrero al 26 de abril de 2015

lunes, 20 de abril de 2015

RESTAURANTE: Goiko Grill

Dicen que son las mejores hamburguesas de Madrid. Desde luego si no lo son, poco les falta. Hablo hoy de Goiko Grill, un sitio al que fui con unos amigos para celebrar el inicio de la Semana  Santa... y no pudimos elegir mejor, la verdad.

Goiko  Grill es una idea que nace en una familia venezolana de origen vasco, los Goicoechea. La aventura comenzó con un primer local en María de Molina, hasta llegar a los tres que hay hoy (Conde Peñalver y General Perón, al que fuimos nosotros).

El ambiente es sencillo y desenfadado, aunque con una estética cuidada. La carta es monísima, la verdad. Pero bueno, vamos a lo que realmente importa... ¿qué pasa con las hamburguesas?

Goiko Grill - las Mejores Hamburguesas de MadridEn una palabra: ESPECTACULARES. La carta contiene todo tipo de hamburguesas, desde las más clásicas a las más originales, con ingredientes como guacamole, aceite de trufa, plátano o mantequilla de cacahuete. Todas con unos nombres muy chulos. Nosotros éramos cuatro, y cada uno pidió una distinta, todas ellas buenísimas y más que razonables en cuanto a cantidad... de hecho no fuimos capaces de llegar al postre.


Venga, ahora vienen las pegas, seguro que son carísimas. Pues nada más lejos de la realidad: todas están entre 8 y 10 €, lo habitual para este tipo de comida y con una relación calidad/precio que ya les gustaría a muchos locales.

Pero bueno, alguna pega tendrá que tener... si me tiráis de la lengua, diré que el camarero estaba excesivamente pendiente de nosotros, lo que a veces nos hacía sentir un poco incómodos. Dos veces tuve que decirle que aún no había terminado, porque quería llevarse los platos. Y eso sin estar el local lleno, así que un punto en contra para ellos.
Aún así, fue una experiencia súper placentera. Eso sí, el local es pequeño, y tengo entendido que los otros dos también, así que se hace imprescindible reservar. Yo llamé por teléfono, pero me remitieron a su web, en donde resulta muy fácil e intuitivo hacerlo.

Porque ese es otro punto fuerte: la huella digital. Tanto con su página web muy muy cuidada estéticamente, como con su actividad en redes sociales como Twitter, Goiko Grill resulta ser de los locales más activos y día. Eso siempre se agradece, aunque os advierto de que como entréis a ver qué pinta tienen las hamburguesas, lo siguiente es buscar un hueco en la agenda para visitarlo.

¿Dónde? Hay tres locales: María de Molina, Conde Peñalver y General Perón
¿Cuánto? Nachos como entrante para compartir, bebida y hamburguesa, 13-15 € por persona aprox. (marzo 2015)

sábado, 18 de abril de 2015

EXPOSICIÓN: Raoul Dufy

Las exposiciones del Thyssen siempre son un valor seguro. Sea de artistas conocidos o desconocidos, con temáticas más o menos populares, la verdad es que siempre que voy salgo encantada. La única pega es el precio, claro. Pero al final siempre es dinero bien gastado.

La última exposición que he tenido el placer de visitar es la de Raoul Dufy (1877-1953), un pintor francés. A lo largo de su vida pasó por muchas etapas - desde el postimpresionismo, al fauvismo y posteriormente al cubismo - antes de encontrar un estilo más personal. A éste están consagradas las últimas salas de la exposición, indudablemente las mejores. También trabajó desde otros puntos de vista a través de tapices, acuarelas, dibujos, cerámica o telas.

No sólo pasó por muchos estilos y soportes a lo largo de su trayectoria artística, sino que también tuvo que hacer frente a una enfermedad bastante limitante para alguien que trabaja con las manos, al menos en aquellos tiempos. Dufy comenzó a sufrir artritis en el año 1935, y fue uno de los primeros pacientes en recibir corticoides en EEUU en 1950, lo que le aportó calidad de vida en sus últimos años y le permitió seguir pintando.

Sea como sea, la exposición no es muy larga, pero sí suficiente para hacerse una idea de la capacidad creadora de este hombre. El estructura y presentación de las obras es impecable... y como siempre algunos de los mejores cuadros pertenecen a la colección privada de la Baronesa. 

Por último, en cuanto a temas prácticos, nosotros no tuvimos problemas de entradas, pero para ir a este tipo de cosas siempre me gusta reservar con antelación.

Y aquí dejo uno de los cuadros más bonitos de la exposición, si bien gana muchísimo en directo. De hecho, no parece ni el mismo.

El Museo Thyssen desvela la cara más íntima de Raoul Dufy, un gran hedonista
TATE, LONDON, VEGAP
'El campo de trigo' (1929)

Raoul Dufy
¿Dónde? Museo Thyssen-Bornemisza (Paseo del Prado, 8 - Metro Banco de España)
¿Cuándo? del 17 de febrero al 17 de mayo de 2015
¿Cuánto? Tarifa general 11€, reducida (consultar condiciones) 7€. Se pueden sacar con antelación a través de la web del Museo.

miércoles, 15 de abril de 2015

MÚSICA: Monstruos y villanos (OCNE)

Si empecé el blog hablando de la danza como asignatura pendiente, no puedo decir que la música se quede muy atrás. Pero por suerte últimamente aparecen oportunidades para remediar esas carencias, y una de ellas fue el concierto de Monstruos y villanos en el Auditorio Nacional, dentro del ciclo de Cine, Música y Videojuegos.

bates
"Psycho" /Paramount
El concierto, a cargo de la Orquesta y Coro Nacionales de España, comprendía la interpretación de bandas sonoras de clásicos como Instinto Básico, Drácula, Alicia en el País de las Maravillas, Jurassic Park o Star  Wars. El hilo conductor eran los personajes más perturbadores y aterradores de la historia del cine. Miedo reconozco que no pasé, pero disfrutar disfruté un montón. 

La dirección estaba a cargo del alemán Frank Ströbel, que nos regaló tres bises y una noche inolvidable. Además del Coro Nacional, también participó en la segunda parte el Coro de Voces Blancas Antara Korai. 

/Twentieth Century Fox
Reconozco que mucha de la música era desconocida para mí, aunque eso no me impidió apreciar lo brillante de la selección. Muchas veces nos descubríamos con los pelos de punta, especialmente en el segundo acto. Eso sí, la elaboración del programa merece un toque de atención: lo que en principio iba a durar 1h30 se extendió hasta cerca de las 2h45 . Me parece incomprensible desde el punto de vista de la planificación del Auditorio, porque las piezas musicales duran lo que duran. 

Es imposible no destacar nuestro sitio. Estábamos sentadas en la parte izquierda de la orquesta, junto a los músicos. Me parece un lugar fantástico, porque además del espectáculo auditivo, es una fiesta para la vista. Tanta gente, haciendo tantas cosas además de tocar... mención aparte merecen los encargados de la percusión, de un instrumento a otro y haciendo mil malabarismos. Es verdad que la acústica puede no ser óptima, pero honestamente yo, no iniciada, lo disfruté muchísimo igual.

Una experiencia estupenda, la verdad, que me deja con ganas de más. Habrá que estar atentos a las novedades musicales...

¿Dónde? Auditorio Nacional de Música (c/Príncipe de Vergara, 146 - Metro Cruz del Rayo)
¿Cuándo? 10 de abril de 2015

lunes, 13 de abril de 2015

EXPOSICIÓN: 10 Picassos del Kunstmuseum Basel

A mi hermana le gusta mucho Picasso, así que esta semana la acompañé al Museo del  Prado a ver la exposición 10 Picassos del Kunstmuseum Basel, y de paso repasar algunas de nuestras salas favoritas - una visita a Las Meninas o a Las Hilanderas nunca viene mal. Antes de nada, es de rigor reconocer que a ninguna de las dos nos cuesta entrar al Museo del Prado.

Efectivamente, hay 10 Picassos colocados en la parte central del pabellón del Edificio Villanueva. La verdad es que hay algunos bonitos - todos eran desconocidos para mí - , y abarcan bastantes periodos artísticos del pintor. No obstante, no puede decirse que sea una exposición de Picasso de las inolvidables, aunque tampoco creo que sea el objetivo de la misma. Como complemento a una visita al  Museo está bien, sobre todo por lo llamativo que resulta ver arte moderno junto a Las Tres Gracias, por poner un ejemplo. Anacrónico cuanto menos. 

Creo que el cuadro que más me gustó fue éste, Muchachas a la orilla del Sena, según Courbet

Muchachas a la orilla del Sena, según Courbet (Les demoiselles des bords de la Seine, d'après Courbet), Pablo Picasso, Óleo contrachapado, 100,4 x 208 cm, 1950, Kunstmuseum  Basel, adquirido en 1955, Copyright Sucesión Pablo Picasso,  VEGAP, Madrid 2015 - Fotografía de la web del Museo Nacional del Prado

Así que lo recomiendo, en el sentido de que recomiendo visitar el Museo del Prado de vez en cuando para maravillarse con las obras que hay ahí. Y de propina, 10 Picassos. Quién sabe si después no empalmamos con el Reina Sofía...

¿Dónde? Museo Nacional del Prado (Paseo del Prado, s/n)
¿Cuándo? del 18 de marzo al 14 de septiembre de 2015
¿Cuánto? 14 € entrada general (consultar reducciones y gratuidad), incluyendo visita a la Colección permanente

RESTAURANTE: Crumb

El último descubrimiento gastronómico de esta Semana Santa en Madrid ha sido Crumb. Situado en la zona de Conde Duque - que aún tengo que seguir explorando -, oí hablar por primera vez de él en un reportaje de El Viajero, en El País. La primera vez que intentamos ir fue un poco a la aventura, sin reserva - a veces nos gusta vivir al límite. Efectivamente, resultó una opción inviable para un sábado por la noche. Así que a la siguiente, llamamos para evitar riesgos. 


Crumb es un local pequeño pero acogedor en el que tomar unos sándwiches de autor increíbles. La carta incluye varias combinaciones muy peculiares, desde sardinas a pollo con guacamole, para acompañar con guarniciones tales como patatas revolconas. He de decir que me puse muy contenta al verlas - además de lo ricas que estaban - porque es un plato que descubrí hace muy poquito gracias a una amiga de Ávila. Todos los sándwiches oscilan en torno a 10 euros, y también existe la posibilidad de tomarlos con pan especial - desafortunadamente no había el día que fuimos nosotras - por un euro más. La cantidad es suficiente: no vamos a salir de ahí sin poder comer en un mes, pero tampoco con hambre (atención comilones!). También se puede reprochar que son sandwiches un poco caros, pero yo creo que valorando el conjunto, así como la originalidad y la calidad de los ingredientes, es un exceso asumible para la cartera. 

En cuanto a los postres, la crema de yogur que preparan - casera, por supuesto - es absolutamente de otro mundo. Sólo se oía tintinear la cuchara, porque la verdad es que el tarrito de cristal en el que viene se nos quedó corto. Delicioso, de verdad. 

El servicio fue atento, y además ese día el local estaba medio vacío - como el resto de Madrid en Semana Santa, en realidad - así que fue doblemente agradable. Eso sí, recomiendo encarecidamente reservar. De hecho, al menos para las cenas, hay dos turnos.

Volveré, por lo menos a probar el pan especial... y a por otro par de tarros de crema de yogur. 

Crumb (La página web no es que sea el colmo de la información)
¿Dónde? c/ Conde Duque, 8 - Metro Ventura Rodríguez, Plaza España,  Noviciado
¿Cuánto? 15 €/persona, postre y bebida incluidos (abril 2015)



DANZA: Carmen

La danza es una de mis asignaturas pendientes, pero da la casualidad de que ha sido mi última experiencia en Madrid. En muy buena compañía fui a ver Carmen, en el Teatro de la Zarzuela, así que aquí os lo cuento.

Programa del ballet
Carmen es un ballet en dos actos basado en la ópera del mismo nombre con música de Bizet, que a su vez se basa en una novela corta del francés Prosper Merimée, publicada por primera vez en 1845. La historia, a grandes rasgos, es la de don José, un militar que se queda prendado de Carmen, una cigarrera gitana de Sevilla que enloquece a los hombres. Tal es su enamoramiento que abandona el ejército y acaba uniéndose a unos contrabandistas, de los que la gitana también forma parte. Pero Carmen no es mujer de un sólo hombre, y también está con un torero. Los celos hacen enloquecer a don José, que termina apuñalándola.


No he leído la novela ni visto la ópera, y he de decir que he conocido el argumento a posteriori. Me apetecía ver un espectáculo de danza, más después de la buena experiencia de El Sur. 

La versión que presenta la Compañía Nacional de Danza bajo la dirección de Johan Inger se supone que es moderna y ambientada en los años 60, con ejecutivos y rockeros en lugar de toreros y contrabandistas - o viceversa, no lo recuerdo. Desde mi humilde punto de vista, es una interpretación como otra cualquiera al vestuario de los bailarines: sobrio y compuesto por trajes negros, a excepción de la chupa de lentejuelas del torero. Las mujeres, por el contrario, llevan unos vestidos preciosos que hacen que venga a la cabeza la imagen de gitanas y flamencas - no sé si eso es muy años 60.

Pero más allá del vestuario, el ballet está bien, aunque no puedo decir que sea el espectáculo de danza que más me haya entusiasmado. Es un placer verles bailar, eso sí, demostrando una coordinación y una elegancia más allá de toda duda. Pero el tipo de danza es un poco "contorsionista", con movimientos a veces poco fluidos. En el caso del protagonista, muchas veces sentía que estaba viendo una marioneta. 

La bailarina que representaba el papel de Carmen lo hace maravillosamente bien: transmite toda la sensualidad y fascinación que se presupone en el personaje. Creo que el espectador entiende por qué don José enloquece. Los números grupales también están muy bien, me gustó especialmente la discusión entre las mujeres en sujetador. 

Más cosas a destacar: la escenografía está muy cuidada, con unos cuantos bloques que van cambiando su orientación y posición a lo largo del ballet se recrean todos los escenarios. Eso es recurrente en el teatro últimamente, pero no deja de fascinarme. En cuanto a escenas memorables, he de decir que la muerte de Carmen me parece finísima. Comienzan a salir parejas a discutir, siempre acabando con la mujer muerta... preludio de lo que va a suceder con la protagonista. Finalmente don José la apuñala... y ella se aleja en ropa interior mientras su vestido queda "suspendido" en el aire.

Ahora vamos con algún contra... el director y coreógrafo, Johan Inger, se enfrentaba a un reto al tener que adaptar una obra con un marcado carácter español siendo él sueco. Según el programa, por eso decidió utilizar la mirada pura de un niño para acercarse a la historia. Efectivamente, crea un personaje que podría ser muchas cosas, y que aparece por las escenas casi siempre desde una perspectiva pasiva y observadora. Y yo lo siento, pero ese tipo de recursos no me aportan nada, y menos en un ballet. 

En cuanto al sitio, estábamos sentadas en las primeras filas del patio de butacas. No se ve mal, pero falta un poco de inclinación, ya que el escenario está un poco elevado. Probablemente el sitio óptimo para disfrutar de la danza sea el primer piso. 

Pese a todo, me alegro de haber acudido al teatro: disfruté del espectáculo - sobre todo del primer acto, mucho más luminoso - y lo recomiendo. Eso sí, sabiendo que no es un ballet clásico ni una obra tradicional. 

Carmen, de Johan Inger
¿Dónde?: Teatro de la Zarzuela (c/Jovellanos, 4 - Metro Banco de España o Sevilla)
¿Cuándo?: del 9 al 19 de abril de 2015